Hotel Balneario de Sierra Alhamilla - Pechina, Almería

Nacho

Para descansar está muy bien las vistas muy bonitas pero llamarse Hotel balneario y que no haya nada para bañarse. Se supone que hay una piscina pública y la tienen abandonada. Nosotros nos bañamos en un lavadero por la noche con unos alemanes que estaban con su botella de vino, disfrutando del agua caliente, gratis. La cena muy rica.

jose R.

Si necesitas dormir y descansar este es el sitio ideal. Apartado de todo y rodeado de silencio. Masaje y baño caliente en la alberca, solo y con música tranquila. Un auténtico carmen. Muy bonito, sencillo y personal muy amable.

Aurora S. G.

Muy recomendable. Enclave paradisíaco, hotel cuidado con encanto lleno de objetos de coleccionismo. Personal encantador. Los tratamientos y la alberca son maravillosos y en un lugar que desprende historia y solera. Por último el restaurante perfecto con platos típicos. Un 10.

Alejandra A.

Lamentablemente, nuestra experiencia en este hotel dejó mucho que desear. El mobiliario de la habitación estaba viejo y en mal estado, incluyendo la cama, las cortinas, las toallas y los albornoces, que claramente necesitan una renovación. Teniendo en cuenta el estado general de las instalaciones, el precio nos pareció excesivo, ya que no corresponde con la calidad que esperábamos.

Como punto positivo, las albercas son agradables.

No probamos el restaurante del hotel, ya que terminamos yendo al restaurante de al lado, donde nos atendieron muy bien y quedamos satisfechos.

Hari C.

Muy relajante. Nos dimos un baño caliente con música relajante y un tratamiento de barro. Nos dieron mucha privacidad y nos trataron muy amablemente.
Volveremos!

m F.

Las albercas están para renovar. Impresión de descuidado. Una ducha que había la han suprimido. Lástima porque podría ser una buena experiencia.

Nuria M. C.

La verdad que fue una gran decepción,a lo único que no le voy a poner ninguna pega es a la experiencia de la Alberca,por lo demás es un sitio que necesita mucha rehabilitación , reformas y la accesibilidad es nula total sobretodo para personas con discapacidad visual tanto en las habitaciones como en todo el recinto lo cierto es que la calidad -precio no compagina es bastante caro para el servicio que ofrecen en fin espero que lo reformen porque el lugar es bastante único para el relax y la tranquilidad pero necesita una gran inversion.

jennifer S.

El hotel balneario es la primera vez que me genera dudas a la hora de poner una reseña. En primer lugar hablaré del sitio, en la sierra por lo que si buscas despertarte con el sonido de los pajaritos es maravilloso. El precio de la habitación varía por las vistas. Nosotros pagamos más económico por lo que nuestra ventana daba a un edificio abandonado… el precio más elevado da vistas a la sierra que eso si que es espectacular. Vistas que también se ven desde la terraza de la cafetería. El lugar es del siglo XVIII y mantienen la esencia por lo que muchas modernidades no hay, pero si te facilitan wifi y está todo limpio. Hay olor a humedad y a muebles antiguos. De hecho hay antigüedades muy curiosas como un teléfono antiguo, una máquina de tabaco que se pagaba en pesetas, entre otras antigüedades. La cama, no todos vamos a coincidir, pero para mí me ha resultado cómoda y al estar en la sierra no tenía la necesidad de aire acondicionado. El baño limpio, con toallas, champú, jabones y vasos. Contratamos el baño termal que es una pequeña balsa con agua. Sin nada más. Aquí tengo que decir que me esperaba algo más. Estuvimos 1h y después teníamos masaje de espalda. Nos atendió Salva, muy agradable, muy profesional pero el entorno creo que no facilitaba sentirte en un spa. Hay dos zonas de camillas, una de ellas me pareció estar en una sala de hospital. Por lo demás sigue el estilo del siglo XVIII. Tuvimos desayuno. El horario es de 8:30 a 10:30, bufet con autoservicio. Poca cantidad y diversidad de comida. Si tengo que decir, que les pedí pan sin gluten y tenían. Puedes tomarlo en la sala de dentro o el la terraza. La terraza las vistas son muy bonitas pero hay un montón de moscas. El coche lo aparcamos enfrente del balneario y es gratuito. La atención del personal al llegar fue muy buena, nos explicó un poco del lugar, pero a la salida, la verdad que la mujer (diferente a la de llegada) fue muy seca y me dio la sensación que con pocas ganas de atender a los clientes, de hecho me facilitó la factura y tenía que rectificar unos datos y me sentí como que me echaba a mí la culpa por no habérselo dicho antes. Me la rectifico si, pero con desgana. Por las mañanas hay muchos ciclistas por lo que si haces este tipo de deporte, los escuchamos diciendo que les gusta mucho ir por esta zona. Recomiendo este hotel para las personas que huyen del ruido, del ajetreo y del estrés del día a día, porque si consigues desconectar. Esta reseña la hago hablando de lo que realmente os vais a encontrar.